La semana pasada fueron detenidos un hombre y una mujer en Tepatitlán señalados en la probable comisión de los delitos de abuso sexual infantil, prostitución y corrupción de menores, en agravio de una adolescente, hija de la detenida.
Este miércoles por la mañana la Fiscalía Especial Regional del Distrito II informó que estas personas ya fueron vinculadas a proceso.
Inocencio G., quien tenía un puesto de churros en la calle J. Cruz Ramírez en Tepatitlán, y María Teresa G. ya enfrentan un proceso penal por los delitos antes señalados, de manera que permanecerán en prisión preventiva oficiosa por un año como medida cautelar solicitada por el Ministerio Público, debido a la gravedad de los hechos y para salvaguardar a la víctima.
De acuerdo a las investigaciones, desde el año 2017 al 2021, la víctima quien es menor de edad, estuvo sujeta a sufrir abuso sexual presuntamente por parte del imputado Inocencio G., quien en acuerdo con la madre de la víctima, le pagaba en efectivo las cantidades de 3 mil a 3 mil 500 pesos cada vez que se la llevaba para abusar sexualmente de la menor.
Además, fue confirmado que María Teresa G. vestía a su hija adolescente al gusto de Inocencio G., para luego drogarla y que el sujeto consumara el agravio. También se acreditó maltrato físico de parte de ambos. Estos hechos sucedieron en la Tepatitlán.
Al recibir la denuncia del caso por parte de una familiar de la víctima, la Fiscalía comenzó con las investigaciones con perspectiva de género y se obtuvieron datos acreditando la probable responsabilidad de la pareja en la comisión de los delitos narrados, de manera que se solicitó una orden judicial en su contra por abuso sexual infantil, prostitución infantil y corrupción de menores, todos con agravante.
Inocencio G. y María Teresa G. quedaron a disposición del Órgano Jurisdiccional quien consideró que los datos de prueba aportados por el Ministerio Público eran vastos y dictó la vinculación a proceso contra dichas personas, en los términos ya señalados.
La ofendida menor de edad se encuentra a salvo y recibiendo la atención integral que se ofrece a las víctimas de estos casos, entre ella psicológica, con el apoyo de las instancias correspondientes, con el único objetivo de que recupere su proyecto de vida, libre de violencia.