Por cuarta ocasión los operadores de maquinaria que están haciendo el acueducto “El salto – Calderón” perforaron el acueducto “El salto – Tepatitlán” lo que ocasiona problemas para sostener el abasto de agua en la ciudad en tanto que se realiza la reparación correspondiente.
Astepa ha sido en el último mes el blanco de llamadas de enojo, acompañadas de mentadas de madre debido a la continua suspensión del servicio del agua en algunas colonias de la ciudad, aunque la realidad es que quién provoca este problema son los trabajadores del Estado que construyen el acueducto “El Salto-Calderón” y quienes al parecer son expertos en romper tubos pero no en sus maquinarias, ya que por lo menos una vez al mes rompen alguna tubería que provoca el paro del bombeo, dejando sin agua a varios puntos de la ciudad.
Si bien hay tanques de agua en el CUAltos y además hay interconexión de pozos, el acueducto surte a la planta de Viveros, la cual a su vez abastece de agua desde el centro de la ciudad hasta Españita, así como a la zona alta. Viveros proporciona el vital líquido a esas zonas con agua de El Salto, además de las presas el Jihuite y el Durazno.
También surte de agua en otras colonias como la Colosio, Lomas del real, Adobes y Aguilillas, pero en esas zonas se mezcla con agua de pozos, por lo que la afectación es menor.
Los problemas de presión y abastecimiento de agua se pueden extender hasta tres días, ya que arreglarlo no es sencillo ni rápido, el problema se ha acentuado luego de que después de arreglarlo, pasan un par de días y los trabajadores del Estado vuelven a perforar otro tubo con la maquinaria, lo que provoca un círculo vicioso en dónde los más afectados son los habitantes de la ciudad que se quedan sin agua.
En meses anteriores, los fraccionamientos cercanos al periférico eran los afectados, ya que por lo menos una vez a la semana se quedaban sin agua, debido a que los trabajos del acueducto provocaban una baja en las cuchillas de la luz y esto hacía que los pozos de los fraccionamientos dejaran de funcionar, por lo que había que esperar a CFE para que ellos volvieran a subir las cuchillas, situación que podía durar horas o un día completo, el problema se solucionó cuando los trabajadores terminaron de trabajar en el tramo del periférico.