• Los automovilistas no caben
• Los peatones no pueden cruzar
Los trabajos de obra en la glorieta de Las Colonias aún no terminan y ya le han llovido críticas al por mayor debido al poco espacio que han dejado para la circulación de los automovilistas, lo que ha provocado la inconformidad de quienes circulan por la zona, señalando que la mala planeación provocará cuellos de botella en un lugar donde antes no los había.
El proyecto de ampliación de banquetas en la zona que se pensó para mejorar la accesibilidad peatonal ha provocado enojos, quejas y algunas mentadas de madre, debido a que los vecinos de la zona y automovilistas que circulan señalan una mala planeación del proyecto, y advierten “las autoridades se darán cuenta cuando los cuellos de botella comiencen a suceder en el inicio de clases”.
“Con todo respeto, es un peligro el trabajo mal hecho de ese lugar, las calles las dejaron como un embudo, el regreso a clases será un caos, casi sin estacionamiento, machuelos mal hechos, los vehículos grandes terminarán desbaratando las banquetas por que no caben”, señaló Peva Valdivia.
Para Gustavo Romo el trabajo está mal realizado y ejecutado, “las entradas y salidas son muy angostas. Me ha tocado ver cómo el auto de carril contrario invade el otro para alcanzar a realizar la vuelta”.
Y es que, en efecto, las vueltas que antes eran amplias, se han reducido de tal forma, que los camiones de carga o incluso camionetas se ven en la necesidad de invadir el carril contrario para poder dar vuelta, algo que anteriormente no pasaba. Esto a pesar de que recientemente se hizo un reajuste en las vueltas porque se dieron cuenta que efectivamente estaban demasiado amplias.
De acuerdo al proyecto, la glorieta se ampliará dos metros más, mientras que las banquetas también serán más amplias, de tal forma que, de 18 metros para circulación de vehículos, ahora quedarán 10 metros y solo habrá dos carriles para los automovilistas más un tercero para ciclovía, además de 25 cajones de estacionamientos.
Y si bien el proyecto en teoría beneficiaría a los peatones, estos tampoco están muy conformes porque tienen miedo que puedan ser atropellados al no haber espacio suficiente para los automovilistas.
Noé Mota fue más duro en su crítica al considerar que se prevén accidentes recurrentes si el proyecto lo dejan tal cual como está ahora, “Considero que el trabajo ya hecho en lo que serán las incorporaciones y salidas de la Glorieta ocasionarán muchos accidentes, y súmenle la circulación de los camiones del servicio público. Ojalá los diseñadores del proyecto tuvieran la oportunidad de manejar camiones y al mismo tiempo intentar entrar y salir de la glorieta para que se den cuenta que los proyectos de escritorio sin tener idea del campo operacional, son basura. Ojalá puedan modificar algo para prevenir accidentes”.