El Free Fire es uno de los más utilizados, van varios casos en Jalisco
Mural.- Los grupos criminales usan cada vez más la tecnología para poder reclutar en sus filas a los jóvenes. Sin embargo, ya no sólo es a través de las redes sociales ni videos en YouTube, en la actualidad su estrategia se encuentra ¡hasta en los videojuegos!.
De acuerdo con el gobierno federal, los narcotraficantes han encontrado la forma de conectar directamente con los menores, por lo que es importante estar al pendiente de con quién se contactan los pequeños a la hora de estar jugando.
Free Fire es un juego multijugador online de supervivencia disponible en dispositivos móviles. El juego pone a los jugadores en una isla remota con otros 49 jugadores para sobrevivir contra sus enemigos, se puede atacar con armas de alto calibre para emboscar a los jugadores contrarios y conforme se van exterminando a los rivales, se va adquiriendo equipo táctico de protección, municiones y armas adicionales.
Se ha detectado que los delincuentes contactan a las víctimas a través de otros juegos como Call of Duty, PUBG, Fortnite y Roblox, entre otros.
La interacción
En la pantalla de inicio, el juego solicita una cuenta de acceso, para poder comenzar. Pone como red social predeterminada a Facebook.
Se permite la interacción en tiempo real de manera anónima con personas aceptadas en el programa. Se despliega una lista de contactos recurrentes y se le da click en el usuario con el que se desea chatear.
Ahí es donde el reclutador de algún grupo criminal se hace pasar como una persona joven y manda invitaciones privadas para conversar con las víctimas.
Los criminales no se identifican abiertamente como integrantes del narcotráfico, ni usan palabras como “narco”, “cártel”, “halcón” o “sicario”, sino que usan siglas o variantes como: CJNG, CDN, sicari0s, c4rt3l, etc.
A la víctima también le llegan a ofrecer monedas digitales, premios, recompensas o productos que puedan mejorar sus oportunidades y puntajes dentro de los juegos.
El proceso
El criminal y el menor se conocen mediante el videojuego. La víctima agrega a su lista de amigos de Facebook al reclutador del narco, con quien empieza a interactuar de forma más cotidiana.
Una vez que se establece un vínculo de confianza, el criminal le proporciona un número de teléfono de celular al menor, para mantener la comunicación, posteriormente el criminal le ofrece trabajo al joven en otro Estado. Le asegura que sus funciones serán las de estar revisando una frecuencia de radio, para avisar en qué sitios hay presencia de policías. Por esa actividad les ofrecen alrededor de 8 mil pesos quincenales. La víctima puede invitar a compañeros de escuela.
Una vez que aceptan, los citan en una terminal de autobuses donde otra persona les da el dinero para los gastos de viaje.
Los casos de Jalisco
En el Estado ha habido por lo menos tres casos similares, en donde jóvenes han salido en busca de personas que han contactado a través de Free Fire.
Por ejemplo, el 21 de octubre una adolescente de 17 años salió de su casa ubicada en la Colonia Álvarez del Castillo, en El Salto, y se dirigía a Tijuana, Baja California, pero las autoridades identificaron la ruta que seguía.
La encontraron en Culiacán, Sinaloa, y la llevaron con sus padres.
Otra joven, de 14 años, salió de su casa en la Colonia Valle del Sol, Zapopan, el 29 de junio y fue hallada el 22 de octubre en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Gerardo Octavio Solís Gómez, Fiscal del Estado, advirtió entonces sobre los riesgos de las interacciones de menores con otras personas en videojuegos e Internet.
“Sabemos que del otro lado podría estar un adulto haciéndose pasar por un menor o abiertamente se manifiesta como adulto”, explicó el funcionario.