Por Christian Villalobos
Los grandes ganadores: El PRI de Antes y el MORENA de Hoy.
Sin minimizar el resultado del partido oficial el domingo pasado, es necesario hacer un minucioso análisis, suponiendo que MORENA sea un partido nuevo (que de esto no tiene nada y menos por sus personajes que lo conforman), pudiéramos decir que matemáticamente está así:
El PRI de 3 pierde 3 (Hidalgo, Oaxaca y Quintana Roo), El PAN de 3 pierde 1 (Tamaulipas), MORENA gana 4. Aunque en el estado de Hidalgo hay varias lecturas; podemos suponer que era de las pocas entidades federativas donde que no existía la transición política y que ahora sí llegó, sin dejar de lado que ésta se dio si, y solo sí con un candidato que toda su trayectoria política siempre estuvo en el PRI. Entonces, no podrá estar haciendo alarde de que “los anteriores le dejaron un cochinero” tendrá que gobernar con lo que tiene y con lo que el mismo fue parte, entonces ese triunfo podemos dárselo a MORENA como marca, pero no como alma del mismo.
De acuerdo a mi colega y Amigo Francisco González Vallejo, hace el siguiente Análisis que es digno de considerar cada una de las partes que disecciona en las entidades federativas:
“En Aguascalientes (…) Teresa Jiménez, de “Va por Aguascalientes”, su partido el PAN no tendría mayoría absoluta en el Congreso (sólo cuenta con 13 de 27 diputados), pero si la coalición electoral que sostiene con el PRI y el PRD se convierte en coalición legislativa, la eventual gobernadora controlaría el Congreso con 17 diputados (67% del total) y podría cambiar las leyes y la constitución según necesite.
En el caso de Durango el político y cantante Esteban Villegas, de la coalición PAN-PRI-PRD, no tendría mayoría absoluta en el Congreso pues su partido, el PRI, sólo cuenta con 8 de 25 diputados, pero si la coalición electoral que sostiene con el PAN y el PRD se convierte en coalición legislativa, el eventual gobernador controlaría el Congreso con 16 diputados, pudiendo hacer las reformas legales que desee y para modificar la Constitución solo necesitaría convencer a un diputado más.
En Hidalgo si se confirma la tendencia y triunfa Julio Menchaca, de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’, su partido, MORENA, no tendría mayoría absoluta en el Congreso (sólo cuenta con 10 de 30 diputados), aunque la coalición electoral que sostiene con el PT se convirtiera en coalición legislativa, eventual el gobernador NO controlaría el Congreso pues tendría 14 diputados, menos de la mitad.
En Oaxaca, Salomón Jara de coalición ‘Juntos Hacemos Historia’, se convertiría en un gobernador con el control absoluto de su Congreso, ya que de un total de 41 cuenta con 23 diputados de MORENA, dos del PT y dos del verde, sumando 27, y alcanzaría el 65% del total del Congreso. Sólo le bastaría convencer a un diputado de la oposición para hacer las reformas a la Constitución de Oaxaca que desee.
En Quintana Roo, Mara Lezama, de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’ (MORENA, PT, PVM y FPM), sólo con MORENA no le alcanzaría para controlar el Congreso, pero con los diputados de sus aliados, dos del PT y tres del PVEM, controlaría el 56% del Congreso y haría los cambios que desee a las leyes en Quintana Roo.
En Tamaulipas el puntero Américo Villarreal, de la coalición MORENA, PT, PRD, sólo con MORENA no tendría mayoría absoluta en el Congreso (sólo cuenta con 16 de 36 diputados), pero si logra una coalición legislativa con el diputado de MC y las dos diputadas independientes (una de ellas fue Morenista), el eventual gobernador controlaría el Congreso con 19 diputados.”
Una vez realizado el presente análisis, el panorama de 2024 esta tan lejos o tan cerca como lo queramos visualizar, sin embargo la Alianza “VA POR MEXICO” va tarde a la cita, por otro lado Movimiento Ciudadano le sigue haciendo el trabajo neurálgico a MORENA, su aparente independencia de alianzas, se presume el postulado latino de divide et impera (divide y vencerás), el haberle apostado a la alianza, al menos se hubiera ganado un estado más, pero no sabremos que grandes negociaciones existan en palacio nacional y Dante Delgado, y esto ha complicado dichas alianzas.
Hoy más que nunca es menester que los partidos políticos perdedores, hagan los ajustes correspondientes en sus respectivas dirigencias, pues dejaron de manifiesto que no funcionan, que su renuncia pudiera ser lo más sensato que pueden ofrecerle al proceso que está en puerta el próximo año en el laboratorio político que es el Estado de México y es la ante sala de la elección de elecciones de 2024.
Si Alito Moreno, Marko Cortes y Jesús Zambrano, consideran que entre los 3 gobernaban 15.7 millones de personas y ayer perdieron 12.6 millones, es decir, solo mantuvieron 3 millones 100 mil personas, debe ser considerado un triunfo, imaginen como estará en estos momentos Mario Delgado (Dirigente de MORENA) que gobernaba a cero personas y ahora gobernará a más de 12 millones. Ayer mis únicos argumentos que pude hacer alarde es, que no fueron 6 de 6, sino de 4 de 6, es decir, debatir que no fue una derrota es insensato, creer que es un triunfo de la oposición es una tontería, mantener la misma estrategia es un suicidio político.
