• En el rancho El Guayabo, en Pegueros
En un terrible caso pero no tan poco común en esta triste realidad mexicana, la fiscalía del Estado logró obtener la sentencia de 26 años y 4 meses a un sujeto por el delito de abuso sexual infantil agravado, en perjuicio de su propia hija.
Los hechos se registraron desde octubre de 2015, de acuerdo a la investigación correspondiente, cuando Benjamín M. acudía a un domicilio ubicado en el rancho El Guayabo, en Pegueros, donde se encontraba la víctima, su hija, de 11 años de edad.
El sujeto continuamente agredía sexualmente a la menor, y a consecuencia de dichos ataques, procreó un vástago que nació en septiembre de 2016, y aún así los abusos no cesaron y nació un segundo hijo en junio de 2018.
Finalmente la denuncia fue presentada y ésta fue fundamental para que la Fiscalía Especial Regional comenzara con las investigaciones, mediante las cuales se estableció la responsabilidad de este depravado, por lo que policías de investigación lograron su captura para ponerlo ante la autoridad judicial que lo requería.
El sujeto permanecerá en prisión por 26 años y 4 meses por este delito, además de perder la patria potestad de su descendencia.