+ No hay comisario ni subcomisario ni ningún jefe, todos andan de pelada
Arandas, Jal.- Una auténtica joya es en lo que se ha convertido la comisaría municipal de Arandas con distintos delitos a sus espaldas, en febrero de este año fueron acusados de haber sido ellos quienes desaparecieron a Luis Fernando Cervantes Moya de 22 años, quien acudió este municipio alteño para revisar un vehículo, sin embargo, en el intento fue detenido por policías de ese municipio, y desde entonces no se sabe nada de él. Ahora, para aumentar la lista, un policía de esta misma comisaría ha sido identificada como el causante del asesinato de dos personas el pasado 3 de junio, hecho por el cual se había dado a la fuga.
Fue a inicios del mes pasado cuando en un bar conocido como “El Bigotes”, ubicado en la comunidad del El Centro, ocurrió una tragedia que terminó con la vida de dos personas. En ese entonces se señaló que las víctimas eran familiares entre sí, tío y sobrino de 66 y 55 años de edad, quienes había muerto luego de recibir balazos por parte de una persona con la cual discutieron previamente.
Sin embargo, casi dos meses después, la Fiscalía actualizó la información y dio a conocer que había aprehendido a Gerardo J. quien era el que al encontrarse en un bar con su cuñado, festejando su cumpleaños, sacó una arma de fuego e intentó disparar al aire, pero su acompañante intentó evitarlo, por lo que se registró un forcejeo y la pistola fue accionada, hiriendo de muerte al cuñado y a otra persona más que terminó falleciendo en el hospital.
Aunado a la explicación de los hechos, también se dio a conocer que Gerardo J, era policía municipal activo de Arandas y que ese día se encontraba en su día libre, pero llevaba consigo su pistola de cargo, la cual terminó disparando y provocando una herida en el pecho a su cuñado que lo llevó a la muerte, además de que otra persona resultó herida y más tarde falleció.
Desde entonces el individuo se mantuvo prófugo, incluso vivió durante un tiempo en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, pero al parecer añoraba a su terruño, porque recientemente fue ubicado por la Policía de Investigación en el municipio que lo vio nacer, y al continuar vigente el mandato judicial, fue detenido.
¿Y el comisario?
Por si fuera poco la noticia reciente, se dio a conocer de manera extra oficial que la comisaría de Arandas desde hace casi un mes, no tiene comisario, ni sub comisario, ni los otros tres oficiales que le siguen, porque se han dado a la fuga, esto luego de que la Fiscalía del Estado, Guardia Nacional y elementos de la Policía Investigadora hicieran un operativo en dicha comisaría, la cual se debió, precisamente, al el caso de desaparición del tapatío Luis Fernando Cervantes Moya, ocurrido en Arandas el pasado 26 de febrero.
El operativo sucedió el pasado 5 de julio donde hubo una gran movilización en la comisaría, en el que se presume había órdenes de aprehensión contra algunos elementos, sin embargo, casualmente ya no estaban ni el comisario ni sus subalternos siguientes.
En un principio las autoridades municipales dijeron escuetamente a medios locales de ese municipio que los señalados estaban en capacitación, y que no sabían más del por qué del operativo, pero lo cierto es que luego de casi un mes, nada se sabe de ellos y de manera extra oficial, las autoridades locales informaron a medios locales que, efectivamente, los cinco policías estaban como no localizados.
La madre de Luis, Norma Moya, había denunciado públicamente a los policías de haber desaparecido a su hijo.
“De la policía de Arandas fueron ocho patrullas, tres de tránsito y cinco de los policías”, señalando que la propia Fiscalía le había mostrado los videos donde se podía ver a los elementos que habían detenido a su hijo y que desde entonces no se supo nada más de su paradero.
Norma denunció que el día de la detención estuvieron presentes policías a bordo de las patrullas A-23, A-29, A-19, A-23, A-27.
