+ Junto con otros próceres y mártires de la Cristiada
Personajes como Anacleto González Flores y san Tranquilino Ubiarco fueron reconocidos como “Docente humanista en pro de la sociedad”, como homenaje póstumo, por parte del Congreso de Jalisco.
En el marco del Día del Maestro, la diputada María Elba Bravo Camacho entregó el reconocimiento “Docente humanista en pro de la sociedad” a profesores que con su trayectoria y vocación de servicio se han destacado en Jalisco.
En forma póstuma se reconoció a Anacleto González Flores, Miguel Gómez Loza, Luis Magaña Servín, Tranquilino Ubiarco Gómez, María Romo González, Julio Álvarez Mendoza, Cecilio Gómez Castellanos y Ramón Parada López, por quienes sus familiares acudieron a recibir esta distinción en su nombre.
“Un maestro nunca muere, su legado sigue vigente”, así lo afirmó la diputada al entregar reconocimientos también póstumos a los profesores Abraham Sedano Corona, Miguel González Rodríguez, Salvador Hernández Aceves, José Santos Carrillo Villela, Manuel Cordero Espinoza y María Luisa de la Peña Navarro.
El Presbítero de la Diócesis de San Juan de los Lagos, Jesús María Aguiñaga Fernández, compartió su experiencia en el ámbito educativo, refirió que los hábitos ayudan a alcanzar el bien común, sobre todo, en el método aplicado en el Instituto Francisco Orozco y Jiménez, donde labora. Destacó que en esa institución educativa promovieron el desarrollo integral de los jóvenes que llegaron con carencias afectivas y culturales, centraron su trabajo en el humanismo.
Por su parte, el maestro José Guillermo García Murillo refirió que, para lograr la paz se requiere apostar a la educación y al aprendizaje, a la salud y al empleo porque “el México de hoy requiere mejores oportunidades de capacitación”.