+ El Lic. Changoleón sería el presidente de la SCJN
La reforma en el Poder Judicial que planteó el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, causa incertidumbre en los mercados y la sociedad civil, el motivo principal, las dudas ante la posibilidad de que los integrantes de la judicatura federal sean removidos de sus cargos y sustituidos por unos nuevos surgidos de una elección por voto popular.
La propuesta legislativa traza cuáles serán los cargos judiciales que se someterían a votación, las fechas de los comicios y su duración en el puesto. La iniciativa forma parte del paquete de reformas enviado por el Ejecutivo al Congreso el 5 de febrero, cuando se conmemora un aniversario más de la Constitución de 1917, si bien no habían podido aprobarlas, ahora tras unas votaciones que dieron a Morena, el partido en el Gobierno, una aplastante mayoría calificada en el Congreso, le permitirá al oficialismo aprobar enmiendas a la Constitución sin necesidad de negociar con la oposición ni tampoco afrontar a un Poder Judicial adverso.
La iniciativa propone que vayan a elección los cargos de ministros de la Suprema Corte de Justicia, consejeros del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), magistrados del Tribunal Electoral federal, magistrados de circuito y jueces de distrito. En total, más de 1,688 cargos judiciales irían a las urnas, a los que podrán postularse miles de abogados.
De aprobarse, en junio 2025 habrá una elección extraordinaria con 30 candidatos para nueve cargos de ministros de la SCJN (la reforma reduce su número de 11 a nueve) y seis candidatos por cada uno de los 1,635 cargos de magistrados y jueces. Para los ministros, el presidente propondrá 10 candidatos, la Cámara de Diputados cinco, el Senado cinco, y la SCJN 10. Para los magistrados y jueces, cada Poder (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) propondrá dos candidatos por cargo.
Durante el periodo de sus campañas, los candidatos a ministro de la SCJN podrán tener acceso igualitario a radio y televisión para exponer sus propuestas y participar en debates organizados por el organismo electoral, pero no podrán contratar espacios en medios para promocionarse y los partidos políticos no podrán promover a algún candidato. ¿Cómo podrá la autoridad electoral prevenir ambas cosas?
El elegir a nueve ministros de entre 30 candidatos no parece ser muy complicado. Pero lo que sí será extremadamente difícil será elegir a magistrados y jueces porque se tendrá que escoger de entre 9,810 candidatos (seis para cada uno de los 1,635 cargos). Tan solo en Ciudad de México se votarían 339 cargos, 114 jueces y 225 magistrados, y podría haber hasta 2 mil 034 aspirantes, pues cada poder, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, podría nombrar hasta dos candidatos por plaza, Jalisco tendría 122 cargos a elegir con hasta 732 aspirantes.
En el circuito más pequeño, que es el 32º en Colima, habría 78 candidatos, 36 para magistrados y 42 para jueces,
Si bien la propuesta de AMLO, es atractiva para millones de personas hartas de la corrupción de muchos juzgadores federales y estatales, no resolverá el problema. Los expertos señalan que además de ser poco práctica y costosa, trae riesgos significativos: politización del Poder Judicial, corrupción y favoritismo, inestabilidad e ineficiencia por alta rotación. Además, puede aumentar la desconfianza pública por la percepción de parcialidad, falta de diversidad e inclusión, y afectar el desempeño judicial al enfocarse en popularidad y resultados a corto plazo.
El resto de la Reforma
Cambios en la Suprema Corte: La propuesta prevé una reducción en la cantidad de ministros (integrantes) de la SCJN, que pasarían a ser nueve en lugar de los 11 actuales y cuyo cargo mantendrían por 12 años, tres menos que en la actualidad. También se eliminaría las dos salas que funcionan en el presente y la Corte solo sesionaría en pleno.
Para optar al puesto sería necesario ser mayor de 35 años, tener una década de antigüedad como abogado y no haber ocupado cargos el año previo a su elección.
No habría posibilidad de pensión vitalicia en caso de jubilación, como ahora, y la remuneración de los miembros de la Corte nunca podrá superar a la del jefe del Ejecutivo.
Tribunal Electoral
El TEPJF es la máxima autoridad jurisdiccional en materia electoral, se encarga de resolver las controversias relacionadas con los comicios, como las recientes impugnaciones a la elección del 2 de junio realizadas por la oposición mexicana.
Está dividida en dos niveles: la Sala Superior y salas regionales, y, con la propuesta del Gobierno, ambas mantendrían su número actual de magistrados, 7 y 18 respectivamente, pero su mandato se reduciría desde los nueve años que tienen en el presente hasta seis.
Un nuevo Tribunal de Disciplina Judicial
Sustituiría al Consejo de la Judicatura Federal (CJF), órgano de administración y vigilancia interna del Poder Judicial. Podría recibir denuncias de cualquier persona o autoridad, e investigar a ministros, magistrados, jueces y personal judicial por actos contrarios a la ley.
De los siete miembros del CJF pasaría a solo cinco, de los que el Ejecutivo nombraría uno, el Senado otro y el resto la SCJN, con un periodo de seis años cada uno.
López Obrador, quien deja el cargo el 1 de octubre, ha reafirmado que quiere acelerar la aprobación de la reforma una vez que su alianza de partidos tenga el 1 de septiembre la mayoría calificada, sus declaraciones contrastan con las de Sheinbaum, quien el lunes aseguró en una conferencia que acordó en su reunión con el Mandatario hacer una “discusión muy amplia” en un debate público sobre la reforma con sectores sociales en todo el país, así como a barras de abogados, escuelas de Derecho, trabajadores del Poder Judicial y jueces actuales, en un intento de contener el nerviosismo.