Tepatitlán, Jal- El rechazo a una relación sentimental de una adolescente no estaba entre los planes de Donovan Emmanuel, quien creyó que podía entonces obligarla a la mala; no sólo la joven era menor de edad y la acosaba, sino que además la amenazaba con hacerle daño si la veía con algún otro joven en situación sentimental. Afortunadamente la adolescente denunció el hecho y la fiscalía comenzó a tomar cartas en el asunto.
La palabra no parece no estar en el vocabulario de Emmanuel P., quien fue imputado y vinculado a proceso por el delito de ciberacoso, como una acción para prevenir, atender y sancionar la Violencia Digital contra las Mujeres, dentro de los alcances de la Ley Olimpia, luego de una denuncia presentada en Tepatitlán.
Fue en esta ciudad cuando a principios del 2022 el acusado, siendo mayor de edad, se fijó en una adolescente, menor de edad, con la que pretendía relacionarse sentimentalmente, pero ella lo rechazó.
Sin embargo Donovan Emmanuel P. no se conformó con este rechazo y a partir del 28 de enero comenzó a enviar mensajes vía Whatsapp desde su teléfono móvil al de su víctima, generándole miedo, inseguridad e intimidación, ya que le prohibió relacionarse con otras personas, incluso “coquetear, abrazar o besar” a alguien más.
Estas amenazas continuaron por días, hasta que el pasado 5 de febrero del presente año la ofendida se armó de valor y contó a sus padres lo que sucedía, por lo que decidieron presentar la denuncia para parar estos ataques.
Desde entonces la Fiscalía Especial Regional del Distrito II con sede en Tepatitlán de Morelos realizó los actos de investigación correspondientes para salvaguardar a la adolescente, y logró acreditar la probable responsabilidad de Donovan Emmanuel P. en la comisión del delito de ciberacoso, por lo que el caso fue judicializado.
Mediante cita el Juez de Control y Oralidad ordenó la comparecencia del sujeto, quien como ya se mencionó, fue vinculado a proceso al existir datos de prueba suficientes.
Donovan Emmanuel P. ahora deberá cumplir con las medidas cautelares que le fueron impuestas, entre ellas el sometimiento al cuidado o vigilancia de la autoridad, la prohibición para aproximarse, convivir o comunicarse con la víctima y los lugares donde ella se encuentre, durante seis meses, mientras las investigaciones del caso continúan.
Este sería el primer caso de denuncia en Tepatitlán por ciberacoso y que las autoridades toman acciones; y es que normalmente las víctimas optan por no denunciar este tipo de acosos porque creen que no procederá o por el mismo miedo al agresor, mientras que estos últimos, también se sienten intocables y no creen que la víctima pueda denunciarlo.
La fiscalía señaló que cualquier tipo de amenaza, acoso, violencia física o verbal puede denunciarse al ministerio público más cercano y denunciar el hecho, para que sea la fiscalía quien tome cartas en el asunto.
