• Los únicos que ganaron fueron los ladrones con la rapiña
Muertos, desaparecidos, hoteles destruidos y comercios y carreteras dañadas, son algunos de los saldos que dejó el miércoles el huracán ‘Otis’ en Acapulco. Los habitantes no estaban avisados sobre la fuerza del huracán, durante varias horas ni el mismo gobierno federal tenía datos específicos de los destrozos.
Fue hasta el miércoles por la noche que el gobierno de México comenzó a reportar sobre las condiciones del Puerto, que no tenía luz, agua, señal telefónica ni comida, el jueves también comenzaron los saqueos.
El último corte señaló la muerte de 30 personas y 4 desaparecidos tras el paso del huracán categoría 5, aunque la cifra podría subir. Otis se convirtió en uno de los ciclones más potentes en la historia del Pacífico.
Evelyn Salgado, gobernadora de Guerrero, informó que el huracán “Otis” causó afectaciones en 80% de hoteles en el puerto de Acapulco, por lo que anunció que el gobierno estatal pondrá a disposición autobuses para evacuar a los turistas.
El balance de daños tardío viene dado por la afectación del suministro eléctrico y de red móvil que dejó sin luz y totalmente incomunicado a Acapulco y otros municipios costeños. Los fuertes vientos de más de 260 kilómetros por hora del huracán en categoría 5 tiraron 58 torres de alta tensión, lo que provocó un apagón masivo que sufrieron más de 500,000 usuarios. La Comisión Federal de Electricidad informó que en pocas horas había conseguido restablecer el servicio al 40% de los damnificados, en su último informe publicado el miércoles. Este jueves, 1.320 electricistas se encuentran en Guerrero para conseguir devolver la energía a la región.
Uno de los grandes problemas derivados de las lluvias de Otis fue el aumento del río Papagayo, que cortó este miércoles la circulación de la autopista del Sol en ambos sentidos. El asfalto inundado hacía imposible llegar desde Ciudad de México a la ciudad costera, una dificultad que el propio López Obrador vivió cuando se desplazaba a la zona afectada y que fue grabada por el medio Central de Noticias MX. Horas más tarde, la actuación del Ejército con maquinaria pesada consiguió restablecer el tráfico
Acapulco quedó totalmente incomunicada también por aire. El Aeropuerto Internacional de Acapulco se encuentra devastado, con los cristales de la torre de control rotos, la comandancia destruida y el área de mostradores inundada. La secretaria Rodríguez ha informado que los vuelos a la terminal acapulqueña se mantendrán suspendidos hasta nuevo aviso.
Saqueos, desde arroz hasta pantallas planas
Habitantes de Acapulco reportaron que tiendas de autoservicio, comestibles y artículos electrónicos fueron saqueados 36 horas después de que el huracán “Otis” azotara esta ciudad, además, acusaron la escasez de productos básicos como alimentos y combustibles.
Desde pequeñas tiendas de autoservicio hasta almacenes grandes y tiendas que sólo venden a quienes pagan una membresía resultaron afectadas.
Varias personas, en maletas, bolsas y hasta carritos de supermercado, se llevaban todo tipo de artículos, como botellas de agua, comida empaquetada, en medio de las calles inundadas. Pero había otras que cargaban televisores, computadoras, lavadoras y diversos artículos que no son de primera necesidad. La toma muestra varios autos, algunos de ellos de lujo, con las cajuelas abiertas.
Estados Unidos avisó 21 horas antes del huracán
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) alertó que la entonces tormenta tropical “Otis” podría convertirse en un huracán más de 21 horas antes de que el sistema azotara la zona de Acapulco, en la costa de Guerrero.
Por medio de una publicación en redes sociales, el NHC pronosticó por primera vez que “Otis” podría tocar tierra como huracán el martes 24 de octubre a las 2:48 de la madrugada.
‘Otis’ se está fortaleciendo y se espera que se convierta en huracán antes de que llegue a la costa sureña mexicana. Alerta de huracán emitida para la zona del sur de México”, se lee en una publicación de X (antes Twitter) del NHC. Poco más de una hora después, a las 3:01 de la mañana, el mismo centro notificó que “Otis” tocaría el sur de México en calidad de huracán; a las 9:31 de la noche del mismo martes, el organismo alertó que “Otis” azotaría la zona como un huracán de categoría 5, con potencial catastrófico y fuertes vientos que podrían poner en peligro la vida de las personas.
Horas después, el presidente Andrés Manuel López Obrador pedía en X a la gente que buscara refugio, alertado de que el huracán entraría con toda su fuerza. Era demasiado tarde. La gente no pudo prevenirse y “Otis” dejó devastación a su paso. En el lapso de 12 horas, se había convertido de una tormenta tropical a un huracán categoría 5, la máxima en la escala. Se preveía que impactara alrededor de las 5:00 o 6:00 am del miércoles y tocó tierra a medianoche.
Sí estábamos preparados: AMLO
El Presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó el jueves que su Gobierno “estaba preparado” para el golpe del ciclón Otis, y señaló que fue inesperado que rompiera el récord de intensificación al pasar de tormenta tropical a huracán categoría 5 en menos de 12 horas.
“Mi reconocimiento a lo que están haciendo las Fuerzas Armadas desde los primeros momentos, desde antes ya estábamos preparados. Desde luego, fue algo excepcional, inesperado, yo envié un aviso, estaba pendiente cuando se informó que podía entrar con categoría 5”, aseguró el Mandatario en su rueda de prensa diaria.
Otis, que ingresó el miércoles al sureño estado de Guerrero, pasó de tener de vientos de 64 kilómetros por hora a 270 kilómetros por hora en menos 12 horas, algo “atípico” y “poco probable”, que los pronósticos internacionales “no preveían”, expuso la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
En tanto, la aspirante presidencial por Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, compartió un video el miércoles en donde aseguraba que nadie -ni siquiera las autoridades estadounidenses- habían podido prever los daños que causaría “Otis”.
“Se ha dicho mucho que por qué no se previno y, es que fue un huracán que pasó de tormenta tropical a huracán categoría 5 en alrededor de cuatro horas, ni siquiera el servicio meteorológico de Estados Unidos pudo prevenir esa situación, en este momento lo que hay que hacer es solidarizarse”, se escucha en el video.
A pesar de las varias alertas que emitieron las autoridades estadounidenses, las administraciones de López Obrador, ni la de Evelyn Salgado dictaron medidas necesarias para disminuir los daños que “Otis” ocasionó.