+ Quienes viven ahí no los quieren; otros sí
Otra vez los árboles de majagua ubicados en la avenida Jacarandas, fueron motivo de pleito entre habitantes y autoridades municipales, esto luego de que los segundos anunciaran la aplicación de repelente contra aves en algunos de ellos.
Este miércoles el municipio anunció que se aplicó un repelente para aves en 20 árboles ubicados a lo largo de la Jacarandas. “El material no es tóxico, es biodegradable y no daña de manera alguna a las aves”, señaló el comunicado, el cual aseguró que se trataba de una propuesta de una empresa para alejar a las aves de zonas donde su presencia genera algún tipo de conflicto con la población
La respuesta ante este anuncio no se hizo esperar. Muchos, (la mayoría que no viven por la zona) mostraron su molestia por ahuyentar a los pájaros que llegan a descansar a ese punto, señalando que los humanos representan un mayor peligro que las aves que solo quieren un lugar para dormir.
En el otro lado de la moneda, algunos vecinos de la Jacarandas señalaron que solo quienes han vivido las molestias de primera mano pueden comprender la situación y agradecieron buscar una solución de manera respetuosa con el medio ambiente y sin dañar a las aves.
Las majaguas de Jacarandas y las urracas y tordos de cabeza amarilla que duermen ahí no son motivo de discusión por primera vez, el año pasado fueron sometidos a una poda severa sanitaria, debido al excesivo número de aves que han hecho de estos árboles su lugar para dormir, lo que de acuerdo a las autoridades producen una gran cantidad de excretas y por consiguiente una acumulación de amoniaco y ácaros que afecta a los vecinos de los alrededores que sufren de la contaminación, el olor y agravan alergias.