+ Lo que no saben es que a los maleantes los matan rápido
“Policía no, mejor sicario, deja más dinero” así parece ser el pensamiento que la narcocultura quiere inculcar a los jóvenes y también a los pequeños que ahora quieren ser otra cosa cuando sean grandes.
Parte del problema que tienen las instituciones de seguridad pública para reclutar a nuevos policías, tiene que ver con la narcocultura que se ha extendido en la sociedad, lamentó el director de la Policía de Tlajomulco, Omar García.
“Estamos trabajando mucho en lo que viene siendo la proximidad social, el acercamiento y unos programas que llevamos a cabo; por ejemplo, el que es de box (el Torneo de Guantes Azules) y el de fisicoculturismo que se llama Iron Cop, donde invitamos a la ciudadanía”, dijo tras la apertura de la Segunda Generación del Curso de Formación Inicial para Policía Preventivo en la Academia del Municipio.
“Hay algo que nos afecta mucho que es la narcocultura, derivado de los narcocorridos, de las narcoseries, de un falso modo de vida que le muestra a la ciudadanía que eso es bueno y que esto lo aprenden, sobre todo a los niños.
“Los niños ahora quieren ser otras cosas; anteriormente querían ser policías, bomberos, y, ahora, debido a esa narcocultura, que muchas veces los medios de comunicación fomentan mucho, pues la vocación o la ilusión de los niños es una que no es adecuada”.
García señaló que el problema de aspirantes no sólo se da en Tlajomulco sino que también en otros municipios de Jalisco, en donde se ha aminorado el reclutamiento.
“Fue la importancia de crear la Academia de Policía de Tlajomulco, para ir dotando de elementos nuevos e ir crecimiento a la par de como va creciendo la población”.