• Carteles de la droga tienen más empleados que Pemex
Los cárteles mexicanos de la droga se han convertido en el quinto empleador más grande del país, revela un estudio publicado este jueves por la revista Science, la cual también señala que la única forma de reducir la violencia del crimen organizado en México es atajar el reclutamiento de los cárteles, sustituyendo la actual estrategia reactiva por una preventiva.
Encabezado por Rafael Prieto Curiel, del Centro de Ciencias de la Complejidad con sede en Viena (Austria), el informe precisa que aumentar los encarcelamientos conduce a más homicidios y a un mayor número de miembros de los grupos criminales.
En 2021, aproximadamente 34 mil personas murieron en homicidios intencionales en México, el equivalente a casi 27 víctimas por cada 100 mil habitantes”, apuntó el artículo.
Los investigadores en el equipo de Prieto analizaron datos sobre homicidios, personas desaparecidas y encarcelamientos en México entre 2012 y 2022 y los cotejaron con información sobre interacciones violentas entre las organizaciones criminales.
Sobre esa base de datos, Prieto y sus colaboradores calcularon que las organizaciones criminales en México tienen actualmente entre 160 mil y 185 mil miembros, el 17.9 por ciento de ellos afiliados al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el más violento de todos.
El Cártel de Sinaloa tiene un 8.9 por ciento de los miembros de estas organizaciones, seguido por la Nueva Familia Michoacana con el 6.2 por ciento, el Cártel del Noreste con 4.5 %, la Unión Tepito con 3.5 % y el 59 % restante de los miembros de cárteles forman fila en grupos menores.
Esto coloca a los cárteles en quinto lugar como empleadores en el país después de Fomento Económico Mexicano (la empresa embotelladora más grande del sistema Coca-Cola en el mundo), Walmart, Manpower y América Móvil, y por encima de Pemex.
Y es que los cárteles deben sustituir de manera constante las “vacantes” que dejan los reclutas abatidos en enfrentamientos con el ejército, entre ellos mismos, así como los que caen presos. La carrera en el cártel es muy corta y violenta. En 10 años el 17 por ciento de los individuos reclutados por cárteles habrán muerto, y el 20 % estarán incapacitados en alguna prisión”, se apuntó.
A la merma de miembros por las muertes en la puja por el control de territorios y actividades criminales se suman las deserciones, por lo cual el estudio calculó que los grupos del crimen organizado necesitan reclutar de 350 a 370 personas por semana para evitar el colapso debido a las bajas totales.
Según el estudio, actualmente se registran unas 120 muertes semanales relacionadas con las organizaciones criminales, y si se mantiene la tendencia actual hacia 2027 esa cifra subirá a alrededor de 170.
En cuanto a la cifra de miembros de organizaciones criminales, el estudio calculó que de los alrededor de 175 mil miembros activos actualmente la cifra subirá a 220.000 en cinco años si se mantiene la actual política de capturas, procesamientos y encarcelamientos.
Pero la cifra bajaría a 155 mil si se corta el reclutamiento a la mitad, y disminuiría a 110 mil miembros si se impide la incorporación de nuevos miembros, añadió el estudio.
Las muertes en México relacionadas con las organizaciones delictivas han aumentado un 77 por ciento entre 2012 y 2022, y “si el país continúa en esta senda experimentará hacia 2027 un 40 % más de muertes y los cárteles tendrán un 26 % más de miembros”, dijeron los investigadores.
Matemáticamente, por tanto, una estrategia preventiva es significativamente más exitosa que la tradicional estrategia reactiva”, añadieron.
De todos modos, estas organizaciones criminales son tan grandes que, aun si se redujese el reclutamiento a cero, llevaría tres años retornar a los niveles de violencia, ya altos, que el país registraba en 2012, indicó el informe.
De acuerdo con el artículo, los resultados subrayan la necesidad de dedicar más atención al reclutamiento. “Reducir el reclutamiento requiere esfuerzos estructurales en los niveles estatal y local”, expuso.
“Esto se aplica especialmente a las áreas con elevado apoyo de los cárteles, donde ofrecer oportunidades educativas y profesionales que superen los beneficios a corto plazo ofrecidos por los cárteles representa un objetivo crítico para el futuro del país”, concluyó.