Luego de que se diera a conocer el hallazgo de una ladrillera en Teocaltiche con restos óseos en su interior, se destapó que el uso de estas como crematarios para desaparecer a personas es de los más común para el crimen organizado, en el caso particular de esta ladrillera, se encuentra bajo las órdenes de Erick Lara, un jefe de plaza del Cártel de Sinaloa, de acuerdo con reportes de inteligencia del gobierno estatal, señaló el Diario Milenio.
Si bien la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas de Jalisco tiene conocimiento de este método, no es común que realice cateos en estos, debido a que son propiedad privada y necesitan de una orden, tampoco permiten que los colectivos de búsqueda busquen en esos lugares debido a la alta peligrosidad a la pueden estar expuestos sus integrantes.
Los restos óseos que se encontraron en la ladrillera de El Sabino en Teocaltiche, estaban dentro del horno que aparece en la fotografía difundida públicamente, y extraerle material orgánico para realizarle pruebas de ADN, será muy difícil o imposible debido al alto grado de calcinación.
Las autoridades estatales tienen identificado que el cártel de Sinaloa y el cártel Jalisco Nueva Generación se disputan el control de Los Altos de Jalisco, lo que ha convertido en un foco rojo de desapariciones a municipios como Teocaltiche, Lagos de Moreno, Encarnación de Díaz y San Juan de Los Lagos.