En 2024, el último año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y periodo electoral, las prioridades presupuestales estarán concentradas en dos aspectos: programas sociales y las obras emblemáticas del mandatario que aún siguen en construcción.
Solo para programas sociales que se entregan de manera directa a los beneficiarios, se prevé un aumento de más de 727 mil millones de pesos, con lo que se estima que el gasto en desarrollo social sea del 12.8% del Producto Interno Bruto (PIB).
La prioridad del gobierno de López Obrador está concentrada en Desarrollo Social, que tendría un presupuesto de 4 billones 384 mil millones de pesos, lo que representa el 67.6% del gasto programable total.
El mayor aumento de los programas sociales será para la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores, con 100 mil 160 millones 631 mil pesos más, es decir, 28% adicionales en términos reales en comparación con 2023.
El 2 de junio de 2024 se elegirán más de 20 mil cargos públicos, pero el más importante es el de la Presidencia del país, por lo que los 96.8 millones de personas que cuentan con credencial de elector vigente -las cifras pueden cambiar para el próximo año- podrán elegir al siguiente mandatario federal. El sector más grande es el de los adultos mayores de 65 años de edad, quienes representan casi el 13% de las personas que conforman la Lista Nominal.
Estos datos tienen importancia porque la pensión para adultos mayores pasará de 4,800 pesos a 6 mil pesos bimestrales. Para 2024 el gobierno federal previó en el Proyecto de Presupuesto de Egresos 465,048.7 millones de pesos, que es 39% más que lo etiquetado para 2023.
Estos incrementos a los programas sociales los anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador y reconoció que son superiores a la inflación.
Por otro lado, la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente tendrá un incremento del 6.4% en términos reales, comparado con el presupuesto que tuvo en 2023.
Para el siguiente año, se contempla que cuente con 26 mil 863 millones 952 mil pesos.
En el caso del programa Sembrando Vida, se contempla un aumento de 0.02% en su presupuesto en términos reales para 2024, con 38 mil 928 millones 625 mil pesos.
De las acciones a cargo de la Secretaría del Bienestar, la única que contempla una reducción de recursos es el Programa de Apoyo para el Bienestar de Niñas y Niños Hijos de Madres Trabajadoras, para el que se prevé 3.5% menos en comparación con lo que se le presupuestó para 2023. Para el siguiente año, contará con 2 mil 960 millones 369 mil 786 pesos.
Denuncias de uso electoral de los programas sociales
A lo largo de la gestión de López Obrador, la oposición ha denunciado el uso político-electoral del gasto social, y del ejército de “servidores de la nación” encargados de visitar y gestionar los apoyos a los beneficiarios.
Pero no sólo la oposición ha hecho este señalamiento: previo al anuncio de Claudia Sheinbaum como ganadora de la consulta para definir la candidatura presidencial de Morena, Marcelo Ebrard denunció que hubo intervención de funcionarios de la Secretaría de Bienestar a favor de la aspirante.
Sin presentar pruebas de sus dichos, Ebrard señaló que la Secretaría de Bienestar –a cargo de Ariadna Montiel– está usando la estructura de los Servidores de la Nación para promover a la exjefa de gobierno de la Ciudad de México rumbo a las elecciones de 2024.
En respuesta, Sheinbaum ha negado que hubiera acarreos en sus eventos o uso de recursos públicos, y asegura que las acusaciones son parte de una guerra sucia, ya que el apoyo de sus simpatizantes ha sido voluntario.
De acuerdo con la carta de exposición de motivos del presidente López Obrador, la propuesta de concentrar el presupuesto en programas sociales obedece a que “el enfoque de la política económica se mantiene en congruencia con los principios rectores del PND, como una ‘economía para el bienestar’, en el que, ‘por el bien de todos, primero los pobres’”.
En el documento entregado a la Cámara, donde el presupuesto debe discutirse y aprobarse a más tardar el 15 de noviembre.
Y también alcanza para las obras prioritarias
En tanto, para obras de infraestructura se prevé un presupuesto de 147 mil millones de pesos, cuyo mayor monto sería para el Tren Maya, que tendría 120 mil millones de pesos. Aunque eso representa 19% menos que en 2023, se trata de una inversión millonaria para la “etapa de ejecución” de la obra que, según el presidente, comenzará operaciones en diciembre de 2023.
El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec tendría un aumento de 63% en términos reales, pues el gobierno propone un presupuesto de 20 mil 845 millones de pesos para 2024, y que será ejecutado por la Secretaría de Marina. Mientras que el año pasado tuvo 7 mil 682 millones de presupuesto.
Para el Tren Suburbano México-Toluca se prevé una inversión de 4 mil 191 millones de pesos, mientras que para el Tren Suburbano Lechería Jaltocan-Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el gobierno solicita 2 mil millones de pesos.
Aunque la refinería Dos Bocas es otro de los proyectos prioritarios del presidente López Obrador, no es posible rastrear el monto previsto para este año, debido a que la Secretaría de Energía no lo registra como obra de infraestructura.
Sin embargo, el mandatario informó que la inversión hasta 2022 ascendía a 11 mil 650 millones de dólares, lo que representaba un aumento de 46%, pues la proyección del costo de la obra era de 8 mil millones de dólares.
(Con información de Animal Político)