El Senado de la República aprobó por unanimidad una reforma constitucional que garantiza que los incrementos al salario mínimo, tanto generales como profesionales, no estén por debajo de la inflación. Esta medida busca asegurar que el poder adquisitivo de las familias mexicanas se mantenga más estable. La reforma fue turnada a los congresos locales para su discusión y aprobación.
Tras cinco horas de debate, los senadores aprobaron la reforma al artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), con 124 votos a favor y ninguno en contra. La iniciativa había sido enviada previamente al Congreso por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
La reforma ahora será discutida y votada en los 32 Congresos estatales. Para que la medida sea aprobada, se requiere el respaldo de al menos 17 congresos locales.
La fracción parlamentaria que más defendió la reforma fue la integrada por legisladores de Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), quienes calificaron la medida como histórica. Por su parte, aunque la mayoría de los legisladores de oposición del Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento Ciudadano (MC) respaldaron la reforma, algunos de ellos señalaron que esta es insuficiente, ya que consideran que, a pesar de los aumentos recientes, el salario mínimo actual no cubre las necesidades básicas de muchas familias mexicanas.
Durante el gobierno de AMLO, se impulsó una política de aumento al salario mínimo que ha llevado su incremento de 88.36 pesos diarios en 2018 a 248.93 pesos en 2024, lo que representa el aumento más grande en los últimos 36 años, según la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami).
Ahora la presidente Claudia Sheinbaum Pardo prometió que buscará aumentar el salario mínimo un 12% anual, con el objetivo de que éste pueda cubrir 2.5 canastas básicas, frente a las 1.6 actuales. En este momento, el salario mínimo en México se sitúa en 248.93 pesos diarios (aproximadamente 12.80 dólares), siendo el salario más bajo de la segunda economía más grande de América Latina.
Actualmente, alrededor de cuatro de cada diez mexicanos ganan el salario mínimo o menos. Esta reforma pretende fijar un mínimo obligatorio para los aumentos salariales anuales.